Disfrutan la ópera en video Don Giovanni, de Mozart

* Proyectan modernista versión en la Sala Lumiére, dentro del III Ciclo de Ópera en Video

RDDP-03.01

Culiacán, Sin.,  Sábado 13 de agosto de 2016

Comunicado No. 749

La música es la misma, se respeta, pero el entorno, la blanca y giratoria escenografía es contemporánea, el vestuario moderno, el uso desmedido de lencería para remarcar las hazañas de alcoba realizadas por el protagonista, como enfatizando que es una historia que puede suceder en cada época, fue lo que vieron los asistentes la tarde del viernes en la proyección de la ópera en video Don Giovanni, de Wolfang Amadeus Mozart, en la Sala Lumiére del Instituto Sinaloense de Cultura.

Dentro del programa del  Tercer Ciclo de Ópera en Video, en esta segunda sesión se presentó la producción modernista realizada en 2002 para el Festival de Salzburgo, en la que participan cantantes de la talla de la soprano rusa Anna Netrebko como Doña Ana, Michael Schade como Don Ottavio, Thomas Hampson (Don Giovanni) Magdalena Kozena (Zerlina), Melanie Diener (Doña Élvira), Nicola Ulivieri (Leporello) y Kurt Moll (Comendador), bajo la dirección de Nikolaus Harnoncourt, con la participación de la Filarmónica de Viena.

El montaje, que representó un hito importante en la consagración de Anna Netrebko, se singulariza, con esa escenografía de pesadilla, de inframundo, en la que no  hay vegetación ni calles ni casas, sólo almas perdidas que repiten la misma historia de siempre: La del libertino que no ama sino que engaña y seduce, y para lograrlo no para en obstáculos. Mata si es necesario.

 Mujeres en lencería blanca, ausentes, lejanas, lo mismo durante las duras acusaciones de la despechada Doña Élvira que en la escena del cementerio, la muerte siempre presente en la atolondrada vida de éste, Don Giovanni, la versión mozartiana de nuestro Don Juan Tenorio, cantada en italiano.

Quizá para los puristas de la ópera no sean muy agradables los cambios escenográficos. Sin embargo, tienen sentido si se toma en cuenta que a lo que se está asistiendo realmente es al juicio de un personaje cruel, desalmado, incapaz de amar, capaz en cambio de causar el máximo dolor en sus cientos de víctimas, que dan vuelta y vuelta en ese carrusel blanco de puertas que se abren y se cierran o de espacios desolados o habitados por el dolor de sus víctimas.

Don Giovanni, fingiéndose amigo, trata de seducir a Doña Anna, pero en el intento mata a su padre, y huye. Es un tipo calculador, frío, un noble que no ve los límites y, si los ve, disfruta traspasándolos. Apoyado por su criado Leporello, consigue lo que quiere, pero desde que mató al Comendador, las cosas empiezan a salirle mal, y la escena en el panteón es la antesala de su juicio final.

{gallery}stories/2016/Fotografia/Agosto/15/Opera{/gallery}